En muchas catástrofes mueren millones de personas, pero solo unos cuantos animales mueren. Los animales escapan despavoridos horas antes de la hecatombe. Por ejemplo, muchas ratas, serpientes y ciempiés huyen de los terremotos; los tiburones huyen de los huracanes y los ciervos de avalanchas.
Las principales hipótesis sobre este misterio son que los animales huelen los gases que desprenden las rocas antes de los terremotos, que detectan los ultrasonidos (como los perros) o que sienten los campos electromagnéticos terrestres.
Los animales superan nuestra tecnología, haciendo saber que la naturaleza es más poderosa todavía que el hombre.
Para más información: http://www.abc.es/20121018/ciencia/abci-animales-predicen-catastrofes-201210181036.html
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